Como recordarán en la entrada pasada, les platiqué que mi hijo Erik me mencionó que la maestra los ponía a rezar para agradecer “al señor” por la comida que se iban a empujar.
Hoy llevé a Erik al kinder, regresaba a clases después del puente y me fui a hablar con la directora del kinder. Algo que me faltó aclararles que el kinder es de paga, no es de gobierno. Lo menciono porque varios me dijeron que en algunos colegios de paga se batalla para eso del laicismo, y que no necesariamente lo respetan, aún y cuando no tiene un membrete religioso. Esto no lo tenía muy claro a la hora de escribir la entrada anterior. Pero bueno, aquí va el chisme.
Yo: Maestra, buen día, me dice mi hijo Erik que su maestra los pone a rezar para agradecer por los alimentos. ¿Es esto cierto?
Maestra: Sí señor, es algo pequeño, no es religioso ni es doctrina religiosa, simplemente es algo pequeño para agradecer “al señor” por los alimentos y pedirle que no le falte nada a nadie.
Al que me encuentre la contradicción le regalo 10 puntos.
Yo: Maestra, la página y los trípticos del colegio no mencionan que se van a hacer rituales religiosos. Sé que en este kinder, antes no hacían este tipo de rituales. ¿Me puede explicar?
Maestra: realmente es iniciativa de la maestra de Erik, es que les queremos enseñar valores, y ya lo estamos implementando también en primero y en tercero de kinder (Erik está en segundo).
Yo: Los valores no se enseñan con rituales religiosos. Disculpe maestra, ¿Por qué no fui notificado del cambio? Es algo importante.
Maestra: Lo que pasa es que es algo bien chiquito, de hecho no les lleva ni un minuto, pero como le digo, no es doctrina ni es catequismo, es algo pequeño. No es como el colegio México, o el colegio América, ahí sí hay doctrina.
Yo: Pues no estoy de acuerdo, y aunque usted no lo considere así, el acto es religioso. Y por eso Erik no está ni en el Colegio México ni en el América.
Maestra: Yo no creí que esto fuera causa de un problema con algún padre de familia, respeto y le agradezco que haya venido a reclamar, y qué bonito que su hijo tenga la confianza de platicarle algo así.
Yo: Pues sí, me lo dijo. Yo no vengo a decirle lo que usted le tiene que enseñar a mi hijo, a final de cuentas, los papás hacen una evaluación de las escuelas, y toman una decisión. Solamente dígame si estas prácticas van a continuar, para yo tomar una acción pertinente. A final de cuentas, si se continúa con esta práctica, yo saco a mi hijo y se acabó el cuento.
Maestra: No señor, vamos a dejar de hacer esto, voy a hablar con las maestras para que descontinúen los rezos a partir de hoy, y vamos a platicar para ver que vamos a hacer al respecto. Yo considero que el agradecimiento “al señor” es algo bueno, no le vi nada de malo, pero ya no lo vamos a hacer. Lo que le queremos enseñar a los niños es que no sean desperdiciados con la comida, mire, antes de esto, nos encontrábamos los lonches tirados en el patio, a partir de que implementamos esto, los niños han dejado de hacerlo en buena medida.
Yo: Maestra, esto se puede lograr sin invocar a seres sobrenaturales.
Maestra: Pues sí, me da tristeza escucharlo hablar así.
Yo: O.o Mire, yo no vengo a juzgarla por lo que usted cree, a mí no me importa, usted es libre de creer lo que usted quiera. Simplemente le digo que no estoy de acuerdo, que me gustaría haber sido notificado, y que si continúan con la práctica, pues ya veré qué hago.
Maestra: No se preocupe, a partir de hoy se deja de hacer.
Yo: Muy bien.
Me despedí y me fui con el director general (el hijo del dueño). Mas o menos mis argumentos fueron similares, pero me encontré con la sorpresa de que él no sabía de esto, que no le habían notificado. Me reiteró que el colegio era totalmente laico y apolítico, y que esta práctica no es aceptable. Que iba a hablar con las maestras para que dejaran de hacerlo. Me dijo que tienen niños de diferentes religiones y que todas se respetan y no hay discriminación, que estuviera tranquilo.
Le platiqué que es mi opinión, que los niños no deben ser adoctrinados a tan corta edad. El me dijo: “forzados, yo también comparto su opinión, y mis papás, los fundadores del colegio, aunque son muy católicos, de los que no faltan a misa los domingos, creen en el laicismo de las instituciones”.
Me dio gusto escuchar eso.
Hasta aquí llega el chisme. Yo creí que iba a haber resistencia, no dudo que van a hablar pestes de mí, pero me vale madre.
No puedo dejar de notar dos cosas:
Una es que, las maestras, sabiendo que la filosofía del colegio es laica y apolítica, les vale cabeza y se la pasan por el arco del triunfo.
Otra es, a lo que estamos acostumbrados. La religión en México es prácticamente una ceguera de taller. Mucha gente asume que la religión es buena, que los rezos también, y que todos compartimos esa visión. Pero no es así, y eso hay que tenerlo siempre en cuenta.
Recuerdo una cita de Dawkins que dice que no hay niños cristianos, ni católicos ni musulmanes, sino hay niños de padres cristianos, padres católicos y padres musulmanes. Los niños ven en los padres una autoridad, alguien en quien confiar, si se les dicen historias, por más ridículas que parezcan, se la van a creer todita. Chútense
este texto para que se enteren.
Hoy me tocó recoger a Erik en el kinder, cuando íbamos en la camioneta le pregunté que qué habían hecho en la hora del lonche, me contestó “rezamos, ¡ah, no! hoy ya no lo hicimos porque nos dijo la maestra que no había tiempo, que mejor nos pusiéramos a comer”!
Me da gusto que hayan agarrado la onda, ya que no fui en mal plan ni en plan mamón. Nomás lo que es. Solo que, no hubo chanza de sacar el
cuento que me compartió control zape. Lo guardaré para la primaria.